La atención cariñosa y atenta de los propietarios nos hizo sentir queridos y especiales. Su perrita también era adorable. El desayuno con frutas frescas y mermeladas caseras era delicioso. La piscina era perfecta para refrescarse después de nuestras visitas. La decoración de la casa reflejaba la atención y dedicación de los dueños. Los propietarios nos hicieron sentir como en casa y nos encantó la ubicación en una zona boscosa cerca de la playa. Las camas eran cómodas y la vista desde la piscina era impresionante. El desayuno era completo y el café recién hecho. Los anfitriones eran muy amables y las habitaciones eran fantásticas. Recomendamos este lugar al 100% y sin duda volveremos.

Me ha encantado esa habitación moderna. El lugar se encontraba en una ubicación apartada de todo el jaleo no muy lejos del océano, de las playas.

Tuvimos la suerte de disfrutar de hermosas vistas y de una ubicación tranquila, alejada del bullicio del centro. Además, nos encantó la atención amable y servicial de los propietarios, quienes se esforzaron por hacernos sentir como en casa. El desayuno casero con frutas frescas y mermeladas deliciosas fue un verdadero placer. Y, por supuesto, la piscina fue el lugar perfecto para relajarnos después de un día de exploración.

La zona de la piscina, que debería ser tranquila, a menudo estaba ocupada por los adolescentes de la familia, lo que dificultaba nuestro descanso. Además, la habitación era un poco claustrofóbica, sin televisión y con un baño pequeño y sin ventilación.

Los desayunos con vistas. Este alojamiento tenía una ubicación apartada de todo el jaleo en una colina.

Nos ha gustado este hotel y nos encantaría regresar si volvemos a Figueira da Foz. Tenía una ubicación apartada de todo el jaleo, en una colina. No muy lejos de cafeterías y también del centro de la ciudad. Mi habitación era moderna y cómoda y disponía de vistas al mar.

Me encantó desayunar sin preocuparme por el pago porque está incluido en la tarifa. Además, la piscina al aire libre fue perfecta para relajarme y disfrutar del sol. El wifi gratis también fue útil para ponerme al día en mis redes sociales.

Qué pena que no haya wifi en la piscina, así podría haber compartido mi relajación en tiempo real.

Lo más importante - su ubicación maravillosa en una colina. Todo el personal del hotel era bueno. El desayuno con queso y panes estaba muy bien.

La habitación doble en Quinta Bogesi tiene una vista hermosa y una piscina privada. Me encantó el suelo de baldosas, le da un toque elegante. También, la conexión WiFi gratuita es genial para estar conectados.

Aunque la habitación tenía su propio baño, no me gustó que la ducha sea pequeña. Pero eso es solo mi opinión personal, otros podrían encontrarla perfecta.

un lugar buena y estupenda, un hotel lujoso.

No hay nada que no me haya gustado.

Recomendamos este hotel, es total, nos ha gustado mucho el tiempo que pasamos en este hotel.

Este hotel tenía una ubicación apartada de todo el jaleo en una colina. Una habitación moderna y cómodo, una cama cómoda.

Desayuno continental o buffet disponible: ¡imagina despertarte con un festín inagotable de delicias matutinas! Piscina al aire libre para refrescarse bajo el sol portugués, es como tener tu propio oasis personal. Conexión WiFi gratuita en todas las habitaciones, así que puedes mantener a tus seguidores en las redes sociales al día con todas tus aventuras.

Acceso complicado por carretera estrecha y mal pavimentada.

La atención y amabilidad de los propietarios, las camas cómodas, la vista agradable a la piscina y el desayuno completo y sabroso.

Me sentí muy bien, no me puedo quejar.

Nuestra estancia fue de 3 noches, todos eran buenos, me sentí bien acogido. Los panes y el queso del desayuno nos encantaron...

El valor que obtuvimos por nuestro dinero en Quinta Bogesi fue excepcional. La habitación era acogedora y limpia, con todas las comodidades necesarias. La ubicación del hotel, en medio de un entorno boscoso, nos proporcionó una paz y tranquilidad inigualables. Pero lo mejor de nuestra estancia fue el trato del personal, Sylvana y Gerwin, quienes nos hicieron sentir como en familia. Su amabilidad y atención fueron sobresalientes, y siempre estuvieron pendientes de que nos sintiéramos cómodos. El desayuno casero, con frutas frescas y mermeladas preparadas por ellos, fue el toque perfecto para comenzar el día. Además, la piscina con vistas al mar nos brindó momentos de relajación absoluta. También queremos destacar la decoración de la casa, llena de detalles que evidencian el cariño de los propietarios.

La ubicación era buena - justo al lado del centro de la ciudad, de restaurantes y también del océano. Reservamos una habitación súper limpia con vistas a la piscina. El personal era bueno, un verdadero placer tratar con ellos